con el advenimiento de las nuevas tecnologías,
en la que sin auricular aparente una persona puede estar hablando por celular con otra,
he logrado despegarme de uno de los karmas que solían acompañarme:
que la gente me mire especial cuando camino por la calle hablando sola
4.2.11
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7 comentarios:
Algo bueno tenía que tener la tecnología.
Como en muchos otros ámbitos, ahora no se es loco, se es moderrrno. Qué alivio!
jaja! safando!
¡Ídola! Hasta ahora los detestaba, pero tenés razón, es una licencia para nosotros, los habladores anónimos.
yo soy como los sordomudos, gesticulo y llego a hacer quejiditos
(...)
Importan, sí, las grandes preguntas de la humanidad, aquellas que se responden con un sí o con un no. ¿Dios existe? ¿Es bueno ser bueno? ¿Hay agua en Marte? ¿Fue penal? ¿Volvió Internet? La única verdad y no-verdad contundente es que no hemos sufrido lo suficiente; quizá sea porque no nos hemos visto lo suficiente. El ejercicio de vernos el uno al otro no es tan complejo, el ejercicio de vernos a nosotros mismos puede ser aterrador ¿y cómo no serlo si nuestra propia humanidad muchas veces nos resulta nauseabunda? y así se inicia el miedo, con el temor a lo que podemos potencialmente llegar a ser vos o yo. Eso deriva en pánico sólo cuando nos damos cuenta que ya no podemos hacer nada más -¡pero nada en serio!- para que vos dejes de ser vos ni yo deje de ser yo. Vos preguntame, animate, no es una pregunta tan difícil, yo te prometo que seré grandioso y humano, y que responderé que sí o responderé que no, y no de otra manera. Vos preguntame, ¿vale?
(...)
a los de mano libre los miro siemrpe con cara de que le pasa a esteeee, hasta que me doy cuentaaaa que estan hablando por telefono.
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